Alguien que cambió el juego de la NBA es Stephen Curry. El base multicampeón de la liga con los Golden State Warriors se encargó de transformar las acciones del deporte con un estilo único que desarrolló a base de triples y una movilidad que se torna impredecible para los rivales. Bueno, parece que le tomaron los tiempos al Chef y la forma de anularlo que utilizaron este domingo los Houston Rockets podría ser replicada por el resto de equipos.

En San Francisco, los comandados por Steve Kerr fueron anfitriones ante los Rockets con la intención de extender una racha de cinco victorias consecutivas, pero los de Houston tenían la clara intención de mantenerse firmes en el segundo lugar de la Conferencia Oeste. Esto sucedió, ya que el triunfo se consumó con un resultado final de 106-96, pero gran parte del éxito se debió a la enorme labor en el costado defensivo.

Así defendió Houston Rockets a Stephen Curry

Para ir directo al grano y plasmarlo en números, Curry culminó la noche con apenas tres puntos. 0/2 en dobles y 1/8 en triples sin ir a la línea de libres le entregaron al Chef una de sus peores noches desde que juega en la NBA. Steph tuvo un partido errático, pero el trabajo que hizo Houston para neutralizarlo fue muy importante.

La clave estuvo en la velocidad: el ’30’ se caracteriza por no quedarse quieto un segundo y eso genera que los rivales no puedan detenerle el incesante ritmo. Lo que decidió Houston fue seguirlo sin importar lo que esté pasando y si había que dejar un tirador libre, era un riesgo que se debía tomar. Entre Dillon Brooks y Amen Thompson fueron los principales encargados de controlarlo, pero todo el quinteto y los suplentes cumplieron a la perfección con lo planeado previamente.

Las persecuciones y los intercambios de marcas le permitieron a Houston hacer un partido bajo los parámetros normales en cuanto a estadísticas, pero muy contundente en relación a lo que mostró en la duela. La comunicación del equipo fue fundamental y rara vez Curry llegaba a recibir con tiempo suficiente para tomar un tiro cómodo.

Será interesante ver si el trabajo hecho por los Rockets se podrá replicar por el resto de equipos que buscan frenar constantemente al base o si Curry se volverá a adaptar y simplemente se trató de una noche complicada en ataque para él y muy buena en defensa para sus rivales. No fue algo sencillo lo que hizo Houston, pero sí algo claro que surtió mucho efecto.