La rivalidad poco conocida entre Carlos Slim y Elon Musk
Carlos Slim y Elon Musk: dos de los hombres más ricos del mundo, cada uno con una gran influencia en su sector. Uno es el magnate de las telecomunicaciones en América Latina, el otro es el visionario de la tecnología y el espacio. A simple vista, parecen no tener conexión, pero pocos saben que entre ellos existe una rivalidad profunda que ha perdurado por décadas.
El origen del conflicto
A principios de los años 2000, cuando Musk buscaba expandir SpaceX y Tesla, necesitaba una red de telecomunicaciones confiable para conectar sus instalaciones. Una de las mejores opciones era Telmex, la empresa más grande de México, controlada por Carlos Slim. Musk se acercó a Slim con la intención de colaborar, pero fue rechazado rotundamente. No solo fue rechazado, sino que Slim firmó un acuerdo secreto con los competidores de Musk, dificultando la expansión de Tesla en América Latina.
No quedó ahí. En 2016, cuando Musk lanzó Starlink para ofrecer internet satelital global, Slim lo vio como una amenaza directa para su imperio de telecomunicaciones. Telmex, junto con otras empresas tradicionales, ejerció presión política para frenar la expansión de Starlink en varios países de América Latina. Esto enfureció a Musk.
El punto álgido del conflicto
En 2021, SpaceX anunció la implementación masiva de Starlink en México, desafiando las barreras legales impuestas por Telmex. Como represalia, Carlos Slim utilizó su influencia política para impedir la obtención de licencias para Starlink en la región. Musk, lejos de rendirse, criticó abiertamente en Twitter a los “gigantes de las telecomunicaciones monopolistas” y prometió ofrecer internet gratuito a comunidades rurales en México, amenazando la hegemonía de Slim.
El punto culminante de la rivalidad ocurrió cuando Tesla decidió construir una megafábrica en Nuevo León, México, justo en el “territorio” de Slim. Además, Musk implementó Starlink para proporcionar internet a los trabajadores de la planta, reduciendo indirectamente la cuota de mercado de Telmex. Slim entendió que esta no era solo una batalla comercial, sino una confrontación personal.
Presente y futuro
Aunque ninguno de los dos ha confirmado públicamente esta rivalidad, sus acciones muestran que la batalla continúa. Mientras Musk sigue expandiendo Starlink y Tesla, Slim sigue protegiendo su imperio de telecomunicaciones. Esta disputa no solo afecta a los dos magnates, sino que también está moldeando el futuro de la tecnología y las telecomunicaciones a nivel global.
¿Quién ganará esta batalla? Solo el tiempo lo dirá.